Abusos de la Iglesia católica
Quiero partir de la base de que los católicos debemos condenar todos los abusos cometidos por cualquier persona, ya sea dentro de la Iglesia (sacerdotes, religiosos y laicos) o fuera de ella sin ningún tipo de escusas. Esto para mi está claro y no es discutible.
Pero, no debemos tolerar que se mienta deliberadamente, como en el caso de esta noticia del El País utilizando el informe del Defensor del Pueblo. Es el deber de los católicos condenar también estas mentiras que quieren deliberadamente y mediante engaños estadísticos desprestigiar a la Iglesia católica y por tanto a todos los católicos.
Si miramos con detenimiento “el resumen del informe sobre abusos sexuales en el ámbito Iglesia católica” que publica la Web del Defensor del Pueblo, podemos ver los datos con más perspectiva.
En la página 14, en el punto “La dimensión del problema”, se pueden constatar los siguientes datos:
- Que las cifras del informe del Defensor del Pueblo están sacadas de una encuesta demoscópica realizada en 2023 en la que participaron 8013 personas en entrevistas telefónicas y online de forma anónima.
- Que en la encuesta se recoge que el 11,7% de los entrevistados (936 personas) afirman haber sufrido abuso sexual en la infancia o en la adolescencia (antes de los 18 años).
- Que un 3,36% de los entrevistados (269 personas) manifiesta que ese abuso se produjo en el ámbito familiar.
- Que un 9,6% de los entrevistados (770 personas ) manifiestan que el abuso se ha realizado en espacio “Educativo no religioso”.
- Que un 1,13% de los entrevistados (90 personas) manifiestan que el abuso se había producido en un entorno religioso, que no significa que haya sido por un religioso, ya que se incluyen profesores, voluntarios u otro tipo de colaboradores laicos.
- Que un 0,6% de los entrevistados (48 personas) manifiestan que han sido víctimas de un abuso por un sacerdote o un religioso católico.
En estos datos, hay que tener en cuenta que en esta encuesta se iguala el término “acoso sexual” con el de ”acoso verbal”, es decir que cuando se dice “abuso” se está hablando tanto de abuso físico o verbal.
Otro tema a tener en cuenta es que los datos de la encuesta hablan de que los hechos de los abusos fueron durante los años 60 y 70 en su mayoría, y una minoría fueron durante los años 90.
El País, con estos datos de la encuesta realizada a 8.013 personas, utilizando la estadística de forma deliberadamente maliciosa, extrapolando a que en España hay 39.800.000 personas mayores de 18 años, dice que se cifra en 440.000 (1,13%) las víctimas de pederastia en la Iglesia española.
Es decir, teniendo en cuenta estos datos y extrapolando de la misma forma maliciosa, la noticia también podría decir lo siguiente:
- La investigación del Defensor del Pueblo estima en 1.337.000 las víctimas de pederastia en los hogares de España.
- La investigación del Defensor del Pueblo estima en 3.800.000 las víctimas de pederastia en la escuela pública.
Seguro que nos parecería un disparate a todos inculpar al colectivo de la escuela pública o de los hogares españoles de esta forma. Pero claro todo lo que sea meterse con la Iglesia está guay y además es políticamente correcto.
Hay que atajar el problema de la pederastia y en general de los abusos sexuales, ya sean físicos o verbales, pero en todos los ámbitos de la sociedad. No puede ser que se decida hacer un informe sobre abusos en la Iglesia católica, cuando en el mismo se recoge que hay 90 abusos, de las 8.013 entrevistas realizadas, imputables a la Iglesia y, sin embargo, volver la cara cuando este mismo informe dice que hay 269 abusos en el ámbito familiar o 770 abusos en el ámbito escolar no católico. Esto es hacer una lectura sesgada del problema, con una clara intención anticatólica.